Desde hace tiempo me han dicho que ronco. Les contesto que, si estuviesen durmiendo como yo, no se enterarían y no me oirían roncar. Sé que es molesto porque yo también oigo rocar (aunque no me queje tanto!); sólo espero no llegar a los niveles que nuestro amigo Forges, con su habitual humor, refleja en la siguiente viñeta. ¡Tanto por los demás, como por mí!
No hay comentarios:
Publicar un comentario