30 may 2015

LA HUERTA DE AVELINO

Cuando llega la hora de la jubilación oficial y termina la rutina de ir al trabajo todos los días, las personas se dedican a realizar otras actividades con las que ocupar el nuevo tiempo libre de que disponen.


La ocupaciones post-jubilacionales son múltiples, pero quizás una de las más habituales es la de dedicarse a cuidar una huerta. Y ese es el caso del que va hoy este post. Pero, ¡ojo!, no se trata de una huerta cualquiera, sino de una muy especial en la que concurren características muy peculiares. Las imágenes que acompañan al post pueden dar buena cuenta de la singularidad de la misma.


Como se ve, se trata de haber aprovechado un terreno urbano en medio de un barrio de Zarautz, que alucina por sus características: una estrecha y larga franja de tierra en el espacio que separa el muro de la comunidad de las Clarisas y el encauzamiento del riachuelo que atraviesa el pueblo, más conocido como “río Pestes”.


En este exiguo terreno, Avelino, pintor retirado (de los de brocha gorda) ha creado una huerta, que es el asombro de toda la gente del pueblo y de los alrededores, por su trabajo y disposición, así como por el cuidado con el que se dedica a su mantenimiento.


Queda a la vista la ordenada organización de los espacios para las distintas plantaciones de los vegetales y hortalizas que cultiva, así como las nuevas técnicas que aplica para obtener los mejores resultados en su huerta: micro invernaderos individuales para los brotes de los plantones con bidones plásticos, redes para proteger las plantas de la voracidad de las aves urbanas, discos CD colgados para espantar pájaros…


Una huerta en verdad admirable.


Es más, igual le propongo que se presente al Guiness de los Records como el patatal más estrecho del mundo, ya que su plantación de patata no excede del medio metro de anchura.


Bromas aparte, hay que reconocer el mérito que tiene Avelino al haber creado un huerto que es la admiración de todo el pueblo.

24 may 2015

FOTO POESÍA





Texto: Juan Robledo López
Fotografía: Oscar (hiskinho) Flickr
Retoques y montaje:
Jokin Izar

16 may 2015

MARIPOSAS



Cuando el otro día, en una de mis marchas diarias, se me cruzó un ejemplar de mariposa vulcana (foto izda.)  me llevé una agradable impresión puesto que hacía mucho tiempo que no veía una de ellas.

La seguí con la mirada durante un par de segundos, ya que pasó rauda para perderse entre la vegetación de los jardines que limitan con el golf de Zarautz, y seguí mi camino reflexionando sobre la poca variedad de especies de mariposas que podemos ver en la actualidad.


Quizás yo mismo haya tenido algo que ver con ello porque recuerdo perfectamente como al llegar el verano, siendo chavales, una de nuestras actividades preferidas era la de ir “a cazar mariposas”.


En cuanto nos quedábamos de vacaciones nos entraba un afán coleccionista de mariposas que nos empujaba al monte a la caza indiscriminada de todo tipo de lepidópteros. Raro era el día que no volvíamos con más de una docena de ejemplares ensartados en una paja, que luego trasvasábamos a una caja con cada mariposa atravesada por su alfiler.


Las colecciones de mariposas duraban lo que las vacaciones; al llegar el inicio de curso volvíamos a nuestras rutinas y las cajas acababan en la basura porque nuestra madres estaban ya hartas de tanto bicho en casa. Pero mientras nos habían servido para identificar especies, diferenciar carácterísticas entre los insectos, distinguir curiosidades y para aprender nombres rarísimos como Collias, Papilio, Parnassius, Nynphalis o Vanessa, e incluso para llegar a admirarnos con la variedad de mariposas de la fauna de nuestros alrededores.


En la actualidad, aunque se siguen viendo mariposas, lo cierto es que su variedad es mucho menor, reduciéndose casi en su mayoría a mariposas blancas (blanca y blanquita de la col, foto dra. arriba) y a las mariposas de muro (abajo, dra.)
 
ARRIBA
Presentación del libro "Mariposas de Bizkaia" que recoge la variedad de mariposas existentes en dicha provincia y que son prácticamente las mismas que en Gipuzkoa.

ABAJO
Dos libros en formato pdf referentes a las mariposas del País Vasco.

http://www.euskomedia.org/PDFAnlt/adeve/66likaenidoak.pdf

http://www.heteropterus.org/pdf/Heteropterus/Heteropterus25.pdf

9 may 2015

REGALOS DE CUMPLE



A todos en nuestro cumpleaños nos hacen regalos. Pueden ser de muchas clases: esperados, sospechados, dirigidos, sosos, grandes, simpáticos, inesperados... en alguna ocasión hasta flipantes o decepcionantes.

El que comento hoy, de mi último cumpleaños hace un par de semanas, y cuya foto acompaña al post, me hizo especial ilusión.

No es que sea un regalo que destaque por precio ni por aparatosidad. Se trata de un pequeño libro que  recoge muchos guiños de mi relación con mi hija y de mi idiosincrasia desde un punto de vista divertido y friki.

¡Gracias, "princesita"!

1 may 2015

AVES URBANAS


Desde que la humanidad se asentó en poblaciones hemos estado acompañados de animales, algunos cobijados por nosotros mismos, pero otros en estado de completa libertad.

Muchos de ellos han resultado ser dañinos y perjudiciales (insectos, roedores…) y aún hoy en día los seguimos combatiendo, pero otros no nos han perjudicado, simplemente han vivido en comunidad con los seres humanos.

Quizás el grupo más importante de ellos han sido las aves; multitud de especies que, sin llegar a ser domésticas, si que son en realidad “urbanas” y para las que la ciudad o el pueblo constituye su hábitat natural.

La diversidad  de aves urbanas varía con las zonas, aunque hay algunas que son extensivas a todas ellas, como podría ser el caso de los gorriones. Otras son más específicas como las quasi plagas que suponen, por ejemplo, las cotorras en Barcelona o las palomas en Zaragoza.

Aquí en Zarautz, en la costa gipuzkoana, tenemos también nuestras aves urbanas, algunas aparecen de vez en cuando como las gaviotas (que también representan una quasi plaga mientras están en nuestros tejados), pero otras las tenemos ya afincadas en nuestras calles, arbolados y jardines durante todo el año.

El gorrión es el ave más abundante, si bien últimamente me da la sensación de que su número ha descendido bastante significativamente.
No pasa lo mismo con los mirlos, que, además de ser cada vez más numerosos, ahora te los encuentras en cualquier lugar,  a todas horas y sin ningún tipo de vergüenza ni temor, con un descaro que…¡bueno!

Otra especie que me ha llamado la atención últimamente ha sido la de los petirrojos. Hasta no hace mucho se podía ver alguno que otro, ocasionalmente, en las zonas verdes del pueblo limítrofes con la campiña, pero ahora es bastante corriente verlos en los jardines, aunque, eso sí, continúan con su proverbial timidez y temor hacia las personas.

Tenemos también otras muchas especies dependiendo de la temporada: golondrinas, patos, jilgueros, garcetas, colirrojos, vencejos… incluso una vez he llegado a ver un martín pescador.

Creo que a nivel ornitológico no nos podemos quejar en el pueblo.